La crisis del coronavirus nos ha traído a todos el vivir una situación excepcional. Tras las medidas de confinamiento, se ha traducido en que tendremos que llevar mascarilla permanente de manera obligatoria en casi todo el mundo. ‘Civility’ es una nueva mascarilla con una particularidad única. Es transparente.

Cliu ha ido un paso más allá y ha creado la primera mascarilla transparente, inclusiva, segura, sostenible y tecnológica. Todo en uno. Ahora que las mascarillas son un complemento obligatorio. De hecho en esta se pueden combinar y elegir entre cinco colores. El proyecto es obra del emprendedor francés Pierre Blondon al que se le ocurrió la idea cuando buscaba una mascarilla para su hija pequeña. Blondon ha reunido a un equipo formado por 14 diseñadores industriales y 15 ingenieros. El resultado es una mascarilla confeccionada en un material transparente que deja ver nuestra cara y nuestras expresiones. 

La mascarilla tiene dos válvulas a los laterales. Esos dos filtros, precisamente, cumplen con la norma EN 14683 / ASTM F2100-19 que son capaces de filtrar el 98% de virus y bacterias presentes en el aire. Además, en palabras del fabricante, se trata de dispositivos de gran «rendimiento y respirabilidad». Los filtros de la Civility filtran el aire en ambas direcciones. La mascarilla es ajustable a cualquier tamaño de cara. Cada par de filtros tiene una vida útil de 12 horas. La mascarilla puede limpiarse con un simple trapo mojado en alcohol o en un limpiador con al menos el 60% de alcohol. Sus creadores aseguran que dura muchos años si la tratamos bien. La mascarilla ‘Civility’  está disponible esta en Indiegogo a unos precios que van desde los 35 euros del pack normal hasta los 30 euros del modelo para niños. 

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