La extenista española pasó por los micrófonos de El Larguero para analizar el éxito de Garbiñe Muguruza en las WTA Finals, un torneo que ella estuvo cerca de conquistar.

Arantxa Sánchez Vicario, una de las grandes figuras de la historia del tenis español, pasó este jueves por los micrófonos de El Larguero de la Cadena SER para valorar la conquista del título de las WTA Finals por parte de Garbiñe Muguruza, un trofeo que Arantxa se quedó a las puertas de conquistar en 1993. 

«Lo vi, realmente fue un partidazo. Me alegro mucho por Garbiñe porque jugó mucho mejor que su rival. Yo me quedé cerquita, pero ella, con el apoyo de Conchita, lo ha conseguido. Hacen un dúo maravilloso». «Las WTA Finals es el último torneo del año. Se cambia de sede y superficie mientras que cuando yo jugaba sólo se celebraba en el Madison, con el bote muy rápido y sin apenas intercambios. Perdí en cuatro sets, luché, pero no pudo ser y me quedé cerca de conseguirlo. Ahora está mejor organizado, son menos jugadoras, pero es más emocionante. Y Muguruza aprendió y se adaptó. Las circunstancias afectan. Hemos tardado años en ganar el título, pero es muy bonito que Garbiñe lo haya logrado. En nuestra época había más estilos de juego, pero todo evoluciona y ha sido un gran éxito”. «Garbiñe y yo somos distintas. No es que no me quiera mojar sobre si es mejor que yo o no, somos diferentes y las circunstancias también lo son. Yo tuve que jugar con Steffi Graf y ahora está más abierto. Es injusto comparar. Lo más importante es que el tenis español está al alza». 

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